miércoles, 24 de febrero de 2010

LA CUMBRE DE LA UNIDAD


LA CUMBRE DE LA UNIDAD
Por: Luis Fernández



La cumbre de la unidad, que organiza el mecanismo permanente de concertación política conocido como el Grupo de Rio, para los días 22 y 23 de Febrero en México, deberá constituir un importante aporte hacia la unidad regional de América Latina y el Caribe.


Las 34 naciones invitadas y los 25 presidentes presentes en este conclave, debatirán sobre importantes temas , como el de los nuevos mecanismos de ayuda para la reconstrucción de Haití, sobre seguridad e inmigración y el tema fundamental de este encuentro , que es la creación de un bloque regional de América Latina y el Caribe, sin Estados Unidos y Canada.

El documento base para la creación de este bloque Latinoamericano, fue debatido en varias reuniones previas de los cancilleres, quienes unificaron ideas sobre este importante mecanismo, que busca unificar la voz de la región en los foros internacionales, este documento deberá ser conocido por los participantes en la cumbre, para que de este modo quede sancionado definitivamente por los presidentes de América Latina y el Caribe.

La idea de la unidad de Latinoamérica ha surgido, desde el inicio de nuestras luchas por la independencia hace ya casi 200 años, este tema es un viejo sueño de formar una patria grande y una poderosa nación unida en base a la historia, la cultura y la defensa de la soberanía y que logre el desarrollo y la prosperidad de una región en la cual viven alrededor de 570 millones de personas.

Estas ideas de unidad han tenido muchas dificultades, ya que los pueblos de América Latina, tienen muchas similitudes pero también algunas diferencias, como su tamaño territorial, los recursos , su grado de desarrollo social y político y su avance democrático, lo que ha sido magnificado por poderes extraños, con el fin de mantener divididos a los pueblos Latinoamericanos.

Simón Bolívar que fue siempre un abanderado de la unidad de nuestros pueblos, planteo lo siguiente, ‘ La unidad de nuestros pueblos no es simple quimera de los hombres, sino inexorable decreto del destino”, este pensamiento de Bolívar nos dice claramente que la unidad de América Latina y el Caribe no es algo utópico o de teorías huecas, sino algo obligatorio, para enfrentar a nuestros enemigos y lograr el avance y el progreso de nuestras empobrecidas naciones.

Esta región sometida y explotada desde hace muchos años por poderes extranjeros, donde la pobreza, la marginalidad y la desigualdad van en aumento, no puede seguir dividida, es el momento de crear nuevos espacios de concertación y dialogo que posibiliten acuerdos que beneficien a los millones de Latinoamericanos que viven en la pobreza mas extrema.

La cumbre de la unidad, tal como lo han planteado algunos de sus propiciadores, debe contribuir a una nueva institucionalidad regional, que impulse las cosas positivas y los avances logrados en el camino de la unidad, la cooperación y la integración, consolidando los esfuerzos realizados para fortalecer, la presencia de América Latina en los escenarios mundiales.

Hay que consolidar todo lo que une a los pueblos de América Latina, para enfrentar con éxito los retos y desafíos que se tienen por delante, la actual situación económica mundial, nos presenta muchas oportunidades y muchas dificultades, las que dependiendo de cómo las abordemos , propiciaran mas pobreza y marginalidad o mas desarrollo y progreso.

Los pueblos Latinoamericanos han desarrollado importantes proyectos de integración regional, como el MERCOSUR, la comunidad andina, el sistema de integración centroamericano (SICA), el CARICOM, el ALBA etc. y los gobernantes de América Latina, se han pronunciado a favor de profundizar la integración regional, lo que ha creado un ambiente de unidad real, que debe ser aprovechado para constituir , una verdadera organización sin tutelas extranjeras que represente los intereses de la región Latinoamericana.

Lo importante ahora no es solo lograr la conformación de esta nueva organización de los pueblos latinoamericanos, sino garantizar los mecanismos de seguimiento, que aseguren, el éxito de esta tarea integracionista, impulsando la participación de todos los países mediante un efectivo mecanismo de consultas que produzca hechos y soluciones a los problemas, es esta la manera de lograr avances significativos y creibles, en este camino de la unidad de América Latina.

Los presidentes de la región reunidos en México, tienen el gran reto de lograr que la ansiada unidad de los pueblos de América, comience a ser una realidad, los pronunciamientos hechos hasta ahora conducen a la conclusión de que esta vez será posible, la conformación de este nuevo organismo, sin tutelas de las grandes potencias y que como propondrá Brasil podría llamarse unión de América Latina y el Caribe.

Esperemos que los resultados de esta cumbre de la unidad, sean satisfactorios para los pueblos de Latinoamérica, que aspiran a que todos juntos caminemos en una sola dirección, que es la que nos conducirá al progreso, el bienestar, la justicia social y la equidad, esto de manera natural provocara relaciones armoniosas entre los distintos gobiernos de la región y una nueva etapa en las relaciones bilaterales de todos los pueblos de América Latina.

Santo Domingo, R.D.
22/02/2010







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